Cuando se aborda el tema de Primeros Auxilios, se debe pensar no solo en la estabilización de las constantes vitales del paciente, sino de la actuación segura en la emergencia y minimizar las posibles consecuencias negativas de la misma para los primeros respondientes.
La estabilización inicial de la escena, la prevención de situaciones futuras y la estabilización de la víctima, son acciones que se abordan desde ésta temática.
Estabilizar el lugar de la emergencia requiere una gran capacidad de observación y predicción de daños por parte de los diversos respondientes, ya que existe inmerso en los Primeros Auxilios, la necesidad de disminuir consecuencias negativas para los/as auxiliadores/as.
Una vez los primeros respondientes estabilizan el área, el siguiente paso es poder abordar a la víctima de manera segura también, para ello es necesario contar con equipos de BIOSEGURIDAD, que buscan evitar la transmisión de microorganismos y aparición de enfermedades en quienes prestan ayuda.
Necesariamente cualquier respondiente debe guiarse por los protocolos internacionales de respuesta ante una víctima, donde se práctica la guía de los pasos (Basados en letras) de PROTOCOLO DE RESPUESTA A UNA EMERGENCIA, de la siguiente manera:
A.Vía aérea despejada: Verificar que la víctima respira y que su vía aérea está totalmente limpia de secreciones y cuerpos extraños, permite una sobrevida mayor para la víctima y en éste proceso es muy importante estabilizar la columna cervical de la persona, buscando evitar secuelas importantes para la víctima. Para poner en práctica dicho paso, el respondiente debe verificar que la persona respire en el lapso de 5 segundos (Puede realizar el M.E.S.: mirar, escuchar y sentir la respiración durante esos 5 segundos)
B. Buena ventilación: No sólo reconocer que la persona respira, sino además que lo hace sin dificultad, es una habilidad importante que quien presta Primeros Auxilios debe desarrollar para dar respuesta a cualquier emergencia en salud que tenga una víctima. Verificar la frecuencia respiratoria de la persona durante el lapso de 1 minuto (Un minuto), permite saber si la persona cuenta con la capacidad de oxigenar su sangre, y tener un buen aporte del mismo a los diversos tejidos.
C. Circulación y Control de hemorragias: Determinar si hay una buena frecuencia cardíaca o si hay hemorragias que amenacen la vida de la víctima, constituye un factor importante para saber cómo funciona el corazón y los vasos sanguíneos, pero además estabilizar posibles emanaciones de sangre, permite mejorar la sobrevida del paciente. Todo aquello que ayude a mantener homeostasia (Equilibrio) corporal, facilita y mejora la sobrevida de la persona. Cuando un primer respondiente moviliza a la persona de manera poco segura o de forma innecesaria, se corre el riesgo de lesionar al paciente o agravar la situación del mismo, por ejemplo: mover a una persona sin percatarse de un posible trauma cervical, genera secuelas para la persona que puede traer consecuencias devastadoras para él/ella y sus familias (El hecho de quedar confinado a una silla de ruedas, hace que la economía familiar se vea deteriorada y por ende, disminuye su calidad de vida – solo por mencionar la parte económica- pero hay que valorar el aspecto personal en dicha situación).
Valorado y estabilizado todo el sistema cardiorrespiratorio, es posible determinar otras lesiones que amenacen la vida y estabilizarlas para mejorar la capacidad de respuesta de la víctima.
D. Estado de conciencia: Se debe evaluar la respuesta neurológica de la persona y si su respuesta está orientada en espacio (Donde está), tiempo (Qué día es hoy) y persona (Cuál es su nombre), con el fin de determinar si la persona no tiene ningún trauma en su cabeza o si la persona no ha consumido sustancias alucinógenas que puedan agravar la situación o desviar un posible diagnóstico. Es importante saber si hay sensibilidad mantenida en la estructura física de la víctima, si puede ofrecer respuestas en las esferas: Ocular, verbal y motora (Calificándola en la escala de valoración de Glasgow- Escala de coma-) y posibilitar un tratamiento precoz y sobrevida de la persona.
E. Exposición con control de hipotermia: Se buscan lesiones que pongan en riesgo a la persona y atenderla de forma precoz y efectiva. Buscar en las señales corporales lesiones que amenazan la vida, puede mejorar las condiciones de la víctima. Es muy importante saber investigar en las señales físicas qué puede poner en riesgo la vida de la persona y el entrenamiento permite que se adquieran habilidades para hacerlo de la manera más efectiva posible.
Cuando se han tratado lesiones consideradas “vitales”, se pasa a estabilizar otras lesiones que, aunque no ponen en riesgo la vida, si pueden perjudicar las condiciones y convertirse en factores amenazantes de las personas.
Estabilizadas las lesiones más amenazantes, se pasa a atender otro tipo de situaciones que también implican deterioro en la vida de la persona que sufre un traumatismo. En ésta segunda fase, se hace una revaloración de todo lo que ya se estabilizó y se evalúa si hay una buena respuesta por parte de la víctima, situaciones como: sensaciones de muerte, ansiedad por la condición de víctima, falta de información por parte del personal tratante, son condiciones que pueden ser atendidas efectivamente y que deben ser identificadas de manera precoz por quien presta los Primeros Auxilios, evitando afecciones profundas en la víctima.
A Grosso modo, es la forma de abordar una situación de emergencia y atender una víctima en dicha situación.
Mauricio Andres Díaz García
Técnico Profesional en Atención pre Hospitalaria